Existe cierta confusión respecto a los distintos tipos de setas mágicas y trufas que existen. A continuación resumimos las confusiones más frecuentes:

Setas hawaianas

Se trata de una variedad de las Copelandia cyanescens (también llamadas Panaeolus cyanescens o pancyans) de la variedad Hawaii, pequeñas setas coprófagas (necesitan estiércol para crecer) que son mucho más potentes que las setas Psilocybe cubensis (las más habituales que se suelen cultivar). Se pueden cultivar en interior con el método PF Tek añadiendo estiércol de caballo a los vasos y haciendo bandejas de poca profundidad, requieren más intercambio de aire fresco y la temperatura de fructificación es unos 3 C más alta que las Psilocybe cubensis, lo cual es una ventaja en climas calurosos. También existe la Psilocybe cubensis PES Hawaiian, que al ser cubensis, su potencia es menor que las copelandia.

Monguis

Se conoce como monguis al hongo Psilocybe semilanceata, el cual se recolecta en exterior y no es viable su cultivo en interior. Entre otros lugares se suelen recoger por el norte de España (Navarra, Galicia, Asturias, etc).

Setas mexicanas

Aunque existe una variedad que es Psilocybe Mexicana (que producen trufas), se suele denominar setas mexicanas a las Psilocybe cubensis mexican. Estos hongos son muy populares y han sido utilizados en ritos religiosos como una llave para la comunicación con los dioses.

Trufas, sclerotia, piedras filosofales

Se trata de Psilocybe tampanensis, Psilocybe mexicana (diferentes que las P. cubensis mexican) o similares. Su cultivo es diferente y tardan más en crecer. Las trufas, a diferencia de las setas, son una masa endurecida de micelio que es más resistente a condiciones adversas del entorno que el micelio normal y se forma de ciertas especies de hongos como un mecanismo de defensa ante la sequedad, frio, calor o humedad excesiva. Contienen psilocina y psilocibina.